Para notar sus efectos calmantes, tomaremos el remedio de miel y limón caliente, justo antes de meternos en la cama. Así evitaremos los episodios de tos nocturna.
La tos es una afección respiratoria que padecen muchas personas, y se puede presentar con mayor frecuencia durante las horas de la noche, especialmente en las madrugadas, cuando hace más frío. De igual manera la tos la pueden sufrir tanto los niños como los adultos, siendo mucho más común en los niños muy pequeños y en los adultos mayores.
En esta ocasión vamos a conocer algunos remedios naturales que pueden ayudar a calmar esa tos nocturna que no deja dormir o vivir tranquilas a muchas personas alrededor del mundo. Se trata de remedios naturales que durante años han demostrado su efectividad y que hoy por hoy se deben rescatar y poner en práctica para solucionar y mejorar la calidad de vida de un gran número de personas.
El limón y la miel
El limón y la miel son una excelente pareja para tratar y mejorar los síntomas de la tos nocturna, por lo que se debe tomar justo al momento de acostarse.
Se trata de una preparación muy sencilla, pero de una gran efectividad. Lo primero que se debe hacer es calentar un pocillo de agua al que se le agrega una cucharada de miel y una de jugo de limón. Esta preparación se debe tomar caliente e inmediatamente meterse debajo de las cobijas, de esta manera se sentirán mucho más sus efectos calmantes que descongestionan especialmente la garganta y las vías respiratorias, evitando los episodios de tos. Después de haber tomado este remedio no se debe tomar nada frío.
Jarabe de cebolla y miel
El jarabe preparado a base de jugo de cebolla y miel es muy efectivo para tratar la tos, especialmente previene los molestos episodios de tos que se pueden presentar en horas de la madrugada. La cebolla tiene grandes propiedades anti-bacterianas y antibióticas, la miel por su parte tiene muchas propiedades antisépticas, anti-inflamatorias y antibióticas, entre muchas otras que, combinadas, forman un remedio natural muy especial para aliviar y prevenir la tos.
La manera de preparar este jarabe es bastante sencilla, lo primero que se debe hacer es ahuecar una cebolla grande, en el hueco que logramos hacer se agregan unas cucharadas de miel, la cual se deja en reposo durante un par de horas.Durante ese tiempo la cebolla soltará sus jugos, los cuales se combinan con la miel dando lugar al fabuloso y efectivo jarabe de cebolla y miel, del cual se debe tomar cada hora una cucharada.
Otra forma de preparar este efectivo jarabe es, sacar rebanadas de cebolla y colocarlas en un tazón, enseguida se le agrega la miel y de igual manera se toma cada hora una cucharada del jarabe que se obtiene mediante este procedimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario